CUANDO LA LACTANCIA MATERNA NO ES POSIBLE

Si la lactancia materna no es posible, ésta deberá ser suplida por las fórmulas de inicio, elaboradas con leche de vaca adaptada. Estas leches han sido modificadas para que asemejen a la leche materna tanto en proteínas como en grasas e hidratos de carbono.

Las fórmulas de continuación son leches adaptadas que no han sufrido tantas modificaciones, formarán parte de la alimentación del lactante a partir de los seis meses y hasta el año de vida o más en función de la decisión de los padres. Ésta se puede alargar hasta los 18 meses. Algunas fórmulas pueden presentar mayor contenido de sodio, calcio y fósforo.

Cómo preparar un biberón

Se seguirán atentamente las instrucciones del reverso del envase. Es necesario tener las manos recién lavadas. En un biberón limpio y esterilizado (hasta los cuatro meses del bebé) se añadirá agua embotellada (no es necesario hervirla) hasta la medida necesaria y posteriormente se añadirá la leche en polvo, guardando siempre la relación de 30 ml de agua por cada cacito (medida incluida en los envases) de leche en polvo.

En caso de tener que desplazarse, no se debe preparar previamente, es preferible llevar

el agua templada en un termo y justo antes de la toma proceder a la realizar la disolución.

También existen otro tipo de fórmulas llamadas especiales que son administradas a aquellos bebés que presentan intolerancias o alergias dietéticas por errores congénitos del metabolismo o bien por problemas gastrointentinales.

Fórmulas sin lactosa

Derivan de la leche de vaca.  Su uso está indicado cuando existe un déficit de lactosa intestinal.

Fórmulas de soja

A base de aislado proteico de soja que sustituye a la proteína de la leche. No contienen

ni lactosa ni sacarosa. Recomendadas para lactantes con galactosemia e intolerancia a la lactosa. No se ha demostrado que prevengan o traten los cólicos en los bebés ni para prevenir la enfermedad atópica.

Hidrolizados proteicos

Son de dos tipos, fórmulas hipoalergénicas o semielementales, y fórmulas hipoantigénicas.

Con las hipoalergénicas se tratan las alergias e intolerancias a las proteínas lácteas de vaca. En contraposición tiene un sabor no muy agradable, alta osmolaridad y coste elevado. Las hipoalergénicas están parcialmente hidrolizadas, por lo que tiene son parecidas a las fórmulas de inicio. Están diseñadas con fines preventivos, no están indicadas con fines terapéuticos.

Fórmulas antiestreñimento

Favorece la absorción de la fracción de grasa de la leche, del calcio y del magnesio. Son las más apropiadas para lactantes con tendencia al estreñimiento.

Fórmulas antirregurgitación

Fórmulas de inicio y continuación en las que se han añadido espesantes apropiados para bebés. Se utilizan para los bebés vomitadores y/o los que presentan reflujo gastroesofágico no complicado.

Fórmulas anticólico

Con la hidrólisis parcial de las proteínas séricas y el bajo contenido en lactosa se intenta evitar el cólico.